A comienzos de la década de los años 60, Televisión Española, comienza a emitir, superadas las primeras pruebas limitadas a Madrid, para todo el país y, naturalmente, tiene que nutrir la mayoría de su programación de ficción con programas adquiridos al extranjero, pero también se inicia una etapa de producción propia.

Curiosamente, la llegada de un uruguayo-argentino por los platós de Televisión Española, va a contribuir a un cierto auge del fantástico en España. Esta persona es el conocidísimo Narciso Ibáñez Serrador.

Narciso Ibáñez Serrador —Chicho&mdah; es una persona muy popular para el televidente español. Su gran éxito, el concurso Un, Dos, Tres, responda otra vez, le encumbró durante muchos años en el primer plano de los realizadores y creadores de Televisión Española. Aunque este concurso es por el que alcanzó más fama y notoriedad, Chicho Ibáñez tenía anteriormente un amplio curriculum como realizador y director de programas dramáticos para la cadena pública.

Narciso Ibáñez Serrador nació en Montevideo en 1935, hijo de los actores Narciso Ibáñez Menta y Pepita Serrador. Después de la separación de sus padres, viaja a España, acompañando a su madre, donde se integra en la compañía de teatro de ésta, al principio como actor y posteriormente como adaptador y director. Viajará de nuevo a Sudamérica, concretamente a Argentina, requerido por su padre que estaba en aquella época trabajando para la televisión Argentina. Integrado en el mundillo televisivo argentino, realiza para ésta televisión, a finales de los años 50, una serie titulada Obras maestras del terror. En esta serie se efectuaron adaptaciones de relatos escritos por Edgar Allan Poe o Robert Louis Stevenson. En 1960 realizará El fantasma de la ópera, serie basada en el relato de Gastón Leroux, que tendría un enorme éxito de audiencia. En 1962 sería en la serie Mañana puede ser verdad, donde comenzaría a desarrollar su gusto por la ciencia ficción.

Chicho recibe una oferta de la Televisión Española para hacer Mañana puede ser verdad en España. Realmente esta serie fue un remake de la ofrecida en Argentina. Además contó con el protagonismo en muchos de los episodios de su padre Narciso Ibañez Menta, protagonista también de la serie en Argentina.

Bajo su identidad de Luis Peñafiel, Ibáñez Serrador se encarga de elaborar los guiones para una nueva serie de televisión de corte episódico que se titulará Historias para no dormir. En ella se contemplan fundamentalmente los géneros de terror y de ciencia ficción, y como particularidad muy importante destacar que el público tiene acceso a autores grandes clásicos de estos géneros, pues la mayoría de los episodios son adaptaciones de relatos muy conocidos para los aficionados al género.

La serie comienza a emitirse en 1965 con la emisión del capítulo El extraño sr. Killerman. Durante toda su duración, se extendería hasta 1974, se hacen versiones de relatos escritos por Ray Bradbury, Carlos Buiza, Henry James, Arthur C. Clarke, Edgar Allan Poe o guiones originales del propio Ibáñez en su personalidad de Luis Peñafiel.

Uno de los mas famosos capítulos fue El asfalto, basado en un relato corto de Carlos Buiza. Protagonizado por Narciso Ibáñez Menta se alzó con la Ninfa de Oro en el festival de Montecarlo en 1.967. El guión nos muestra la soledad del individuo frente a la sociedad que no es capaz de solidarizarse con el infortunio de los demás.

En el cine sólo realizará dos largometrajes, ambos éxitos destacados en su época: La residencia y ¿Quién puede matar a un niño? En la primera de ellas se narran los hechos extraños de una residencia para señoritas en el siglo XIX y en la segunda historia asistimos a una singular, y macabra, “rebelión” de niños en una isla del Mar Mediterráneo.
En la década de los 60 dirigió también la revista Historias para no dormir que tuvo una distribución notable, entre otras cosas porque se regalaba como incentivo por parte de los visitadores médicos. Y en 1969 dirige para Radio Nacional de España una versión radiofónica de sus éxitos televisivos titulada Historias para imaginar. Entre otras historias se produjo la adaptación de El Fantasma de la Ópera, La tercera expedición o El caso del sr. Valdemar.

Ya a principios del Siglo XXI, y después de sus éxitos en concursos televisivos, coordino una serie de películas dirigidas por directores españoles tituladas Películas para no dormir. El episodio La culpa está dirigido por Ibáñez Serrador.

Capítulos de Historias para no dormir:

1965: El Doble, El extraño Sr. Killerman, El muñeco, El pacto, El tonel, El último reloj.
1966: El regreso, El trapero, La broma, La pesadilla, La zarpa, NN23.
1967: El asfalto, H. Newman, La alarma, La bodega, La oferta, El cuervo.
1968: El aniversario, El cumpleaños, El hombre que vendió su risa, El transplante, La cabaña, La tercera expedición, Donde está marcada la cruz, El colonizador.
1969: El conjuro, El cuervo, El exámen, El triángulo, El zorro y el bosque, Las dos hogueras, Los bulbos, El cohete.
1970: El museo de cera, La esfera, La promesa, La sonrisa.
1974: El televisor.
1982: El caso del señor Valdemar, El fin empezó ayer, El trapero, _Freddy _ .