Los miembros de la Tertulia de La Ideal Taxidermia me han pedido que publique el siguiente comunicado:
Tras saber por los medios de comunicación que la mujer disecada de un museo de historia natural de Francia a de ser devuelta a Sudáfrica, La Ideal Taxidermia por medio de su tertulia expresa lo siguiente:
Que en las salas de historia natural no pueden faltar los humanos.
Que si un país como Sudáfrica piensa que la devolución de una persona disecada en tiempos coloniales le ayuda a restañar su dignidad como nación, pues que sea devuelta la dicha persona disecada. Sin embargo, los abajofirmantes opinan, por consenso, que la dignidad de las naciones y de los pueblos no se debe anteponer a la de las personas, y que por lo tanto el argumento sea que se le devuelve la dignidad que se le hurtó en vida a una persona y no a la Venus Hotentote ni a la preciudadana de un país contemporáneo que fue colonia europea y que sigue padeciendo los estragos de una serie de certezas sobre el mundo que no encajan con su realidad.
Información sobre los hechos que concitan esta declaración:
Por la televisión el cuerpo de la mujer disecada era cubierto por un paño, propietario de todos los boletos para ser de poliéster, de color azul, al parecer para cesar en la exhibición de su cuerpo. La mujer disecada aparecía de pie en el interior de una caja vertical de madera. La información dada verbalmente por la televisión era que la vida de la mujer disecada no fue feliz. Que fue capturada en el año de 1810 de la encarnación del Señor y traída a Europa con un contrato de trabajo para el empleo de esclava sexual; que terminado dicho contrato pasó a prestar sus servicios a un circo en el cual fue exhibida por razones de la extrañeza, para ojos europeos, de su cuerpo, dicha extrañeza consistiendo en el descomunal tamaño de las tetas y culo de la mujer disecada (aunque todavía no lo estaba) en comparación proporcional con el resto de su cuerpo; que murió en el año de 1820 de la encarnación del Señor y que tras su fallecimiento pasó a formar parte de la colección de un museo de historia natural.
Continúa la declaración expresando:
Que los miembros de la tertulia de La Ideal Taxidermia exigen, por unanimidad, que no haya museo de historia natural en el mundo que no se exhiba a un humano disecado, para lo cual y para que no haya en lo futuro discusiones sobre la dignidad de las personas expuestas, estas personas deben presentarse voluntarias a la taxidermia. Los miembros de dicha tertulia han reiterado en diversas y variadas ocasiones su voluntad de ser disecados tras la muerte para que sus cuerpos sean exhibidos en las salas pertinentes para tal actividad. El Sr. Joaquín Chiner, natural y residente de la doblemente leal ciudad de Valencia, ha expresado con anterioridad y de manera reiterativa su deseo de formar parte, una vez muerto, de la colección del Museo de Banyoles, en Catalunya.
Que la duda que amarga las certezas del grupo tertuliano que se reúne en el ya mencionado establecimiento taxidérmico es que en el dicho grupo no se encuentra la necesaria representatividad social, constitucional y/o generacional que cabría desear para el mejor entendimiento de la figura humana disecada. Por lo cual los abajofirmantes instan a la población a firmar documentos en los que se clarifique que, en caso de fallecimiento, y tras serles retirados los órganos necesarios para salvar vidas, sean estas merecedoras o no de dicha salvación, sus cuerpos sean donados no a la ciencia, sino a la historia de la ciencia.
Que de la misma manera, y por voto unánime, la tertulia de La Ideal Taxidermia exige al poder legislativo, sea este de la Unión Europea, del Estado Español, o de las Comunidades Autónomas, que se dote a la ciudadanía de los instrumentos legales pertinentes para que la donación de los cuerpos de aquellas personas que se presenten voluntarias, y ya fallecidas, a la disección, puedan hacerlo sin mayores inconvenientes que los que presenta de por sí su paso de este mundo.
Firman este comunicado los miembros de la Tertulia de La Ideal Taxidermia:
D. Francisco C. Ayaso, taxidermista, Presidente Honorífico
D. Ernesto Martínez Huarefil, Presidente
D. José González Aznar, Vicepresidente
D. Gonzalo García Siniestro, Secretario
D. Joaquín Chiner , Tesorero
D. Manuel Gil Juárez, Vocal
D. Jaime Gansell Rocafull, Vocal
D. Roger Colom, Vocal
D. Marcos Taracido
D. Oscar Villán
D. Arturo Gómez Galerio
D. Jacinto Cordel
D. Emiliano Blanco Ombre
D. Demetrio Peláez Novoa
D. Alfredo Ferreiro Trulock
D. Fernando Villavert
D. Alfredo Bruñó
D. Agustín Ijalba