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Transtornos del sueño por Purranki Sandongui

Purranki Sandongui ha colaborado antes con Almacén en su columna Zasnujismo. Además publica la bitácora 3l Potadero de Bleturge. Su columna aparece los viernes. Esta sección dejó de actualizarse en julio de 2008.

Pero qué cansino ya con el mando el niño

Padezco de zapping soñarreril. Me pongo a soñar que como polvorones fuera de temporada y que los encuentro muy buenos. Tan buenos que me como más cajas de las recomendables, y los polvorones se me acaban por chupar toda la humedad del cuerpo y entonces me agosto y me agrieto y me transformo en algo parecido a la cosa. Y entonces me gustaría comentar en voz alta lo que me parece todo esto, pero lógicamente no hay saliva y pienso en el plan B que consiste en apenarme mucho por la gente que tiene mansiones y le entran a robar, apenarme hasta las lágrimas para intentar bebermelas. Pero no resulta. Al parecer soy un bloque de piedra y nada me conmueve.

O quizás simplemente es una cuestión de grados, y he pasado del habitual 73 % de agua que tiene el cuerpo humano al 6% que tiene el yeso en estado natural, correteando por la sabana y ramoneando las yemas tiernas de los eucalitos.

Y en eso estaba cuando sin solución de continuidad percibo claramente como de golpe tengo el destino del mundo en mis manos y lógicamente he de caminar por el ala de un dc10 a menos 40 grados, a 900 kmh y 10000 metros. Me pregunto de forma bastante acertada qué me matará primero, si la temperatura, si el ventarrón o la hipoxia. Andan compitiendo entre sí cuando fácilmente me encenago con un tiburón blanco en una piscina de las del happy park. Padres divorciados me pegan porque tienen miedo de que el tiburón me elija a mí en vez de a sus hijos. Todo el mundo quiere que sus hijos sean los mejores en algo. Yo eso lo defiendo bastante, así que me dejo pegar y azuzar, y rápidamente he vuelto a la edad media y soy una de esas figuras medievales que no se lo pasaban tan bien y de las que no hacen películas. Soy un siervo y aparentemente debo cosechar maíz. Yo trato de eludir la cuestión y los latigazos razonando que la presencia del maíz en europa es anacrónica con el hecho medieval, pero ahí ya me estoy despertando y el sueño se echa a perder al ser consciente de sí.

Quizás el problema no sea tanto el zapping sino que parece que el mando lo tenga otro.

Purranki

Purranki Sandongui | 03 de febrero de 2006

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