Libro de notas

Edición LdN
Porque me quité del vicio por Elia Martínez-Rodarte

Vicio es todo en exceso y desmesura hasta que lo abandonamos por un nuevo vicio, o nos convertimos en coleccionistas de ellos. Nunca es tarde para desechar uno y encontrar otro nuevo. De los vicios y pasiones que exponen nuestra humanidad hablaremos aquí, en este espacio comandado por Elia Martínez-Rodarte, mexicana, viciosa y escritora, autora de ivaginaria, el día 6 de cada mes.

Jubilemos la ortografía

Marzo fue el mes de los reflectores para Gabriel García Márquez: celebró su día cumpleañero; se emitieron las continuas loas a su persona/personaje que él mismo se ha creado; se dio la nominación de Cien años de soledad como la mejor novela escrita en español los últimos 25 años y recibió el primer libro de la edición especial de la multicitada obra con un tiraje millonario.Amén de todo el oropel de las festividades por su ser y estar en el mundo de las letras, con toda la pompa que ello implica.

Ante tanta refulgencia queda rezagada, más no olvidada, esa cita de mala fortuna que se grabó en el mármol de los próceres que gustan de descansar en poltrona de la ignorancia: ¿cómo se le ocurrió decir a García Márquez que jubilásemos la ortografía?
Sin saberlo, o quizá sabiéndolo y para justificar sus años de periodista en continuo e inacabable aprendizaje, Gabriel García Márquez dio al público en general y a todos los escribidores y escribanos de este mundo, el pretexto dorado para eludir las normas y reglas ortográficas y gramaticales que no sólo son fundamentales, sino que son el último bastión de los buenos hábitos. De facto, a muy pocos les importa la ortografía, lo cual lesiona enormemente nuestro ya bastante erosionado lenguaje.

Ante la importancia del fondo de lo que se escribe, García Márquez invita a ser indulgentes con la forma que en muchos sentidos contiene el significado de lo que se dice. Sin embargo la fiesta de las palabras que es el lenguaje, lo que menos necesita ahora es la disfuncionalidad e indisciplina de las faltas de ortografía, en un ámbito en el cual nuestras palabras son lo único que finalmente poseemos y legamos. El viento sólo se lleva las que formulan sinsentidos.

No podemos jubilar la ortografía. No necesitamos más mediocridad en el lenguaje. No es preciso que demos más tumbos entre los textos confusos, los guiones de noticieros ambiguos y mal escritos, la impunidad con la que articulan los líderes de opinión, la ofensa a la gramática elemental con que se ostenta cada texto que vemos por las calles, faltas que no podemos endosarle sólo a quienes escriben dichas leyendas. También se encuentra atravesado en el problema un sistema de educación que no empuja a la gente a leer, un gremio magisterial que apenas lee, ya no digamos un libro, sino la clase que va a dar a la mañana siguiente, y un sinfín de taras culturales que nos hacen obedientes involuntarios del llamado de Gabriel García Márquez al desgobierno de las palabras.

Fuera de su discurso hermoso de donde salió esa nefanda cita, en donde las letras y las palabras desfilaron en un texto sublime que fue una verdadera celebración al lenguaje, siento que el colombiano hizo un gran daño a la humanidad emitiendo tan dislate.
Por cierto, ésta ha sido la única ordenanza del Coronel García Márquez que ha sido cumplida a cabalidad y rigor: ya no importa si en este país la gente no sabe hacer su lista del súper con cierta coherencia mental. Lo realmente grave es que la gente comete en cada pensamiento, palabra, obra y omisión, una gran cantidad de faltas de ortografía que cegarían a cualquiera.

¿García Márquez no está harto de que la gente use haber cuando se debe usar a ver o viceversa?, ¿no le choca que medio mundo escriba acojido en lugar de acogido? No le da conjuntivitis al leer a un siseante presioso, un amoroso te ciero, escandalosas confusiones entre haya, alla, halla, haiga; multiformes variantes de de, se, di con acentos, sin acentos y sin sentido. O de ver esos textos escritos en mayúsculas con el sobado propósito de ignorar los acentos. Además de la enorme kakofónica kantidad de palabras con ka que cirkulan en los mensajes de messenger, sms de celular, entre otras comunicaciones instantáneas en donde los acentos están en ausencia permanente.

¿No se cansa de eso el gran García Márquez?, o de plano es grande y generoso su perdón a estas pifias porque él ya lanzó la ordenanza sobre usos y costumbres sobre la lengua en español.
Quizás exagero la benevolencia de un hábito de corrección como lo es la ortografía decente. Pero para mutar una lengua debe ser fuerte, y para que sea fuerte deben de apacentar las palabras en una mínima coherencia de signo, significado y significante. Y el español atraviesa desde hace años una rápida transición hacia convertirse en una lengua madre con ramas diversas que deberán de ser lo suficientemente poderosas para soportar los embates con el mix inglés, con el narcolenguaje, con las palabras que abona la tecnología y que deberán de hispanizarse, con las muchas tentaciones que posee ahora nuestra lengua para convertirse en la rectora de un nuevo orden lingüístico en español que ya estamos viviendo. A como vamos la ortografía se va a jubilar sola, con toda la ayuda que le estamos aportando y García Márquez dudo que viva otros 80 años para ayudar a recomponer el rumbo de nuestro amado idioma español.

Elia Martínez-Rodarte | 21 de mayo de 2007

Comentarios

  1. José Luis de la Cruz
    2007-05-23 09:25

    HELIA:
    YO KONKUERDO CONTIGO, ES LAMENTAVLE BER CADA BARRAVAZADA ESCRITA EN FORMA INDISCRIMYNADA, ME CHOKA LA FORMA EN KE DESTRUYEN NUESTRO LENGUAJE. A KOMO BAMOS ESTAREMOS PIOR QUÉ EN VAVEL. CADA KIEN HUSANDOLO KOMO KIERE.
    VUENA ZALUD A TODOC

  2. Elia
    2007-05-23 20:05

    Entendi perfecto tu punto José Luis, muchas gracias por venir a visitarme.

    E.

  3. Candi
    2007-05-23 22:54

    La ortografía es mucha tentación. Ya ves que Juan Ramón Jiménez había suprimido de su abecedario la letra g, sumiéndonos en el desconcierto, cuando encontrábamos en medio de un verso: ‘correjir’, pongamos por ejemplo. Y el todopoderoso García Márquez se permite salidas extravagantes. Tal vez tu hijita, y otras criaturas de su generación, llegadas a la etapa adolescente, saturadas de mensajes de sms, como bien dices, o de vaya usted a saber qué otros artilugios maravillosos y modernísimos, no encuentren chocantes este tipo de butades. Claro que su madre sabrá encauzarla, amorosa y magistralmente, por los senderos de la ortografía.

    Es de esperar que nuestra lengua supere, con salud, todos los trances.

    Saludos cordiales, Elia.

  4. José Luis
    2007-05-24 02:45

    ¿Y qué le digo a mi maestra? ¿Dónde tiro sus desvelos?

  5. Elia
    2007-05-24 19:10

    Candi, muchas gracias por pasar y por el maravilloso artículo que me mandaste. JL, creo que tu maestra (educado vos en México como yo, imagino…) le vale absolutamente madres si aprendiste o no. No creo que se haya desvelado mucho pensando en ello, no digo ahora, sino desde que era tu maestra. Nunca he tenido fe en la educación en México. Me da hueva pensar en el magisterio mexicano la neta…híjole. sé que me tiraré un saco de alacranes en mi espalda, pero sé que l@s maestr@s en Mx, al menos lo de educación básica son mediocres, acomodaticios y convenencieros. Me dan harta hueva. Es una chambota educar hijos en un país como el nuestro en donde a los profes, al menos a la mayoría, sólo están pensando en cómo su sindicato va a favorecerlos y cómo enriquecerse más, cómo no perder su escalafón…Que recuerde jamás los he visto preocupados por los programas de estudios o recomendando un libro. Así son.

  6. Sakty
    2007-05-24 20:07

    Lamento mucho que haya tantas cosas en que entretenerse y dejar de preocuparse por lo esencial, basura entreteniendo a la Ciudad, todos enajenados en porquerías

    Esto de jubilar la ortografía, sólo es un segmento de tantas cosas que hemos dejado olvidadas, perdidas en el umbral de la noche.

  7. Gilberto Gomez
    2007-05-26 08:28

    Interesante artículo. ¿Puedo replicarlo en mi sitio dándote a ti y el sitio todos los créditos?

  8. Elia
    2007-06-05 02:20

    Saludos a todos y a todas…Gracias por pasar.
    Gilberto, será un honor que me cites.

    Saludos

    Elia

  9. andres
    2007-09-23 08:12

    pues todo esto de la ortografia me da para hablarles de un tema que me tiene medio preocupado..resulta que en mi pais Colombia,con el auge de las novelas. Les esta dando por traer a trabajar en nuestras producciones a actores mexicanos y tienen el descaro de decir que los colombianos no sabemos hablar,siendo que el castellano hablado en colombia es reconocido como uno de los mejores en el mundo…no entiendo por que traen disque entrenadores de voz de mexico con el fin enseñar a nuestros actores a hablar mexicano(para ellos acento neutro)...utilizando unas estructuras oracionales muy extrañas y un dequeismo pasado, que raya en lo vulgar para el oido de muchos colombianos que tratamos de aprender lo mejor posible el castellano bien hablado y estucturado…yo creo que muchos saben que nuestra lengua muy dificil y no cualquiera se puede dar el lujo de decir que la habla perfectamente….gracias por su atencion y lo de los puntos , comas,tildes y todo eso no me alcanzo a entrar en el colegio,mil disculpas…jajajaja
    p.d
    para los que no entienden la palabra dequeismo y a que se refiere en esta misma pagina en las letras de la escritora mexicana Elia Martinez-Rodarte aqui les va un pequeño ejemplo sacado de lo que escribio!!!! y para que sea fuerte (deben de )apacentar las palabras en una mínima coherencia de signo, significado y significante. ....me pregunto,por que entonces cuando dice…Pero para mutar una lengua debe ser fuerte..no usa el debe de?????...

  10. Francisco
    2007-11-11 17:45

    Los colombianos hablan buen espanol y mal castellano. Se aplican en copiar las variantes continuas del espanol peninsular y, consecuentemente, copian su degeneracion linguistica. Actualmente el castellano y el espanol son dos lenguas diferentes. En castellano no se dice “esparadrapo, moqueta, ordenador, aparcar’, etc. Esos son galicismos, barbarismos, valencianismos, galleguismos, incorporados al lenguaje diario de los espanoles y sus acolitos linguisticos, los colombianos. El castellano de Cervantes, de Nebrija fue traido a America hace siglos y aqui ha encontrado su santuario, excepto en la copiona Colombia.

    Curioso es que un innovador, simplificador y modernista talentosisimo del castellano sea colombiano. Garcia Marquez. Quiza por eso se distingue del resto de sus compatriotas.

    A propo, los acentos y la boina de la N no existian en el castellano de Cervantes.


Librería LdN


LdN en Twiter

Publicidad

Publicidad

Libro de Notas no se responsabiliza de las opiniones vertidas por sus colaboradores.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
Desarrollado con TextPattern | Suscripción XML: RSS - Atom | ISSN: 1699-8766
Diseño: Óscar Villán || Programación: Juanjo Navarro
Otros proyectos de LdN: Pequeño LdN || Artes poéticas || Retórica || Librería
Aviso legal