Ildefonso Marqués Perales: “No es raro comprobar que la antítesis del hombre de hoy es aquel que no se arriesga. Es, por poner, un ejemplo, aquella persona gris que permanece siempre en su mismo puesto de trabajo, con una misma mujer y que dedica todo su ocio a un mismo tipo de actividades durante toda su vida. Por el contrario, hoy gusta más el ejecutivo que invierte su vida en diferentes proyectos laborales, que tiene una vida sexual liberada y practica desde el puenting al skate surfing. Así las cosas, este género de modernidad sólo puede desembocar en un ataque contra la institución que mejor representa a la seguridad: el Estado del Bienestar. En la actualidad son muchos los que lo atacan, pero lo que me sorprende es que se hallen entre ellos los que más se han beneficiado de él, es decir, las clases medias. No son ya los miembros de la patronal sus más acérrimos enemigos, sino aquellos que le deben casi todo.” La rebelión de los afortunados.