Cuando el ejército anglo-americano invadió Irak se dio un paseo. Las únicas fuerzas interesadas en defender el país, los leales a Sadam, eran escasas y estaban desarmadas. No hubo apenas lucha. Pero las víctimas de Sadam son —o se sienten— ahora víctimas de la coalición y, aunque igualmente desarmados, son legión. En editorial de
La Tercera Digital se analizan algunas de las causas de que los chiítas se hayan sublevado: ” ¿Por qué EEUU no ha conseguido un mayor apoyo por parte de los chiítas? La potencia ha incurrido en una serie de errores en su intento por aportar una solución política a las fisuras étnicas y religiosas que dividen a Irak. Esto, en el caso de los chiítas ha resultado aún más grave, profundizando una desconfianza cuyas raíces se remontan a principios de los ‘90. En 1991, luego que la administración de Bush padre expulsó a la tropas de Hussein de Kuwait, los chiítas respondieron en masa al llamado de la Casa Blanca a sublevarse contra la dictadura. El resultado, sin embargo, fue desastroso para ellos: miles murieron en una terrible masacre a manos de la Guardia Republicana y sin que los norteamericanos usaran algún medio militar para evitarla.”
El poder chiíta en Irak.