Uno sólo puede reaccionar con sarcasmo lacónico ante las declaraciones de todo un Ministro del Interior de España afirmando que el matrimonio homosexual no garantiza la pervivencia de la especie, y así lo hace Jose A. Pérez: El ministro del Interior y el Heteroplaneta.
«Pero no condenemos al señor ministro sin explorar antes todas los recovecos de su tesis. Porque quizá, cuando Fernández Díaz dice que el matrimonio gay no garantiza la pervivencia de la especie, lo que sugiere es que, en el fondo, todos los heterosexuales del planeta cambiarían de acera su tuviesen una serie de garantías legales. A lo mejor lo que este grandísimo hijo de Cristo oculta en el fondo de su razonamiento es que todos los hombres, incluso los de mirada triste y levemente bovina como él, prefieren una polla, dónde va a parar, pero no lo dicen por lo intrincado de la actual legislación.»