Sí, es muy irritante; sobre todo por el absurdo que parece suponer: no poder hacer fotos en museos, iglesias y demás arquitecturas históricas y culturales. Así que apoyamos la iniciativa de J. J. Merelo, que brevemente y con humor recomienda algunos trucos para burlar la seguridad y llevarse la foto a casa: CÓMO sacar fotos en sitios prohibidos (especialmente iglesias).
«Identifica los ángulos muertos. Todos estos sitios tienen columnas, esquinas, coros, trascoros, ábsides, girolas, arquitrabes y bancos de respaldo alto. Búscalos, identifícalos, piensa que el vigilante, normalmente reducido a un radio de acción relativamente pequeño, es el francotirador de Enemigo a las puertas y tú Ed Harris o Jude Law, el que te parezca más guapo. Si te trinca, te pega una espuerta de voces y además vas a ir al infierno. Así que procura que no lo haga.»