Comentarios

1. Jesús
   2008-12-19 12:01

   Creo que la propuesta de Burroughs va mucho más allá del corta-pega internetero. La “técnica del recorte” sería básicamente el equivalente literario de la técnica de sampling que se usa en determinados estilos musicales, sobre todo en hip-hop y música electrónica. Coges un fragmento de una canción o un sonido cualquiera (un ritmo de batería, un riff de guitarra, palabras, grabaciones de campo, lo que sea) y lo introduces en un nuevo contexto musical. El fragmento original adquiere un nuevo sentido, y sirve para crear algo absolutamente nuevo, por lo que no se puede hablar de plagio.

   Es una técnica muy explotada en música, y ha dado lugar a cosas la mar de interesantes. Por ejemplo, el grupo The Avalanches utilizó 3500 recortes o samples para su disco Since I left You, dando lugar a joyitas como ésta:

   http://www.youtube.com/watch?v=QFE1hQeJKwc&feature=related

   En literatura, hasta donde yo sé, es un territorio poco explorado, pero con una gran potencialidad. Aunque me temo que el tema de derechos de autor quizá sea un obstáculo casi insalvable en este ámbito.

2. Marcos
   2008-12-20 11:20

   Claro, Jesús, fui bastante torpe; me refería exclusivamente a la parte técnica, no a los resultados que se buscan u obtienen.

   Y creo que, como apuntas, no tiene apenas desarrollo en literatura por el tema de los derechos, y porque es posible que en las letras el sentido de la originalidad y el plagio esté más mitificado que en otras artes. Así, ese tipo de técnicas se quedan como curiosidades vanguardistas.

   Saludos